Y ahí estaba su padrino para acompañarla en tan señalado día. Junco también se vino, le vino muy bien para desconectar unos días del agobio del trabajo.
He de reconocer que Candela es un auténtico sol, es mas, yo diría que el Sol es Candela.
Fue un fin de semana en Madrid con la otra parte de la familia Riera que tanto adoramos. Como siempre fuimos tratados a cuerpo de Rey.
Y ya de paso vimos al resto de la familia que hacía tiempo que no veíamos. Todo pare estar en orden.
AQuí con mi ahijada:
El resto de la familia:
Después la celebración en un restaurante donde se nos salió la comida por las orejas y un catering que tenían reservado en casa. Carmen lo tenía todo muy bien atado. Gracias, gracias y gracias.